Cafeteras industriales manuales, automáticas, semiautomáticas y súper automáticas

Las cafeteras industriales manuales, automáticas, semiautomáticas y súper automáticas son los tipos de máquinas de café espresso que están disponibles en el mercado. Conózcalos un poco más y sepa cómo diferenciarlos con el fin de comprar el equipo más apropiado para su negocio.

Antes de adquirir cualquier equipo para restaurante o cafetería, y en especial una cafetera industrial, es necesario conocer los diferentes tipos de cafeteras industriales existentes para preparar café espresso, americano, capuccino, latte…

De las principales se destacan las siguientes cuatro:

Cafeteras industriales manuales
Las cafeteras industriales manuales fueron las primeras cafeteras fabricadas para producir lo que llamamos hoy el café espresso, elaborado por medio de agua en alta temperatura y alta presión generada por un resorte y un pistón que son accionados por una palanca manejada por el barista. Con este tipo de cafetera industrial, el barista debe tener unos conocimientos muy profundos sobre todos los condicionantes de la extracción de un buen café, tales como, la calidad del agua, la torrefacción y mezcla de los granos de café, la dosis más apropiada de café y el estado de la máquina de café.

Cafeteras industriales semiautomáticas

En las cafeteras industriales semiautomáticas, la extracción es auxiliada por una bomba volumétrica, una sonda mecánica y una tarjeta electrónica que controla de manera automática el nivel de agua en la caldera. Unos interruptores activan y desactivan la respectiva bomba, por eso, se le dice semiautomática, porque cada persona, auxiliada por las partes eléctricas y electrónicas, determina cuándo quiere empezar y terminar la erogación de agua.

Cafeteras industriales automáticas

Las cafeteras industriales automáticas se parecen en todo a las semiautomáticas, pero además de lo que tienen sus “hermanas menores”, poseen, en lugar de botones, unas botoneras y unos contadores volumétricos de flujo de agua.

A través de las botoneras se puede programar la cantidad de agua que se eroga para la preparación de una o dos tazas ya sean cafés espresso cortos o cafés espresso largos, la cantidad de agua es medida por los contadores volumetricos

Cafeteras industriales súper automáticas

Las cafeteras industriales súper automáticas son conocidas por hacerlo todo, o casi todo solas. Basta poner agua y granos de café en los depósitos respetivos y programar la máquina que empiece a extraer café para una rica taza. Este tipo de cafetera industrial muele, dosifica, prepara y extrae el café de forma automática y es muy fácil de usar.

Existen muchas sub-clases de cafeteras industriales semiautomáticas y automáticas, pero, en realidad, todas pueden ser clasificadas en tres principales:

Cafetera industrial de caldera única de doble utilización

Este tipo de cafetera industrial puede ser adquirido por menos de 1,000 euros o 22,000 pesos. Tiene una caldera y un presiostato que oscila entre 0.9 bar y 1.2 bar de presión manteniendo el agua en alta temperatura y con suficiente presión en la caldera para generar el vapor necesario.

Cafetera industrial multi-boiler

Estas máquinas son generalmente más caras, pueden ser adquiridas por aprox.5,000 euros o  150,000 pesos. Tienen dos calderas independientes (o una caldera y un bloque termo) , una mantiene una temperatura ideal de agua cunado la otra mantiene una temperatura ideal para producir café espresso.

Si está pensando comprar una cafetera industrial por primera vez, la cafetera industrial semiautomática es una de las mejores opciones.

Ofrece las siguientes ventajas:

• Permite activar y desactivar la bomba eléctrica cuando quiere, hace posible controlar el flujo total de agua en cada extracción.
• Hace todas las cosas que uno quiere cuando quiere, mantiene así una temperatura óptima para la extracción del café.
• Programa automáticamente el calentamiento interno siempre que es detectada una baja de temperatura en la caldera.
• Mantiene tanto las temperaturas de vapor dentro la máquina como regula la presión de la bomba eléctrica.

Las cafeteras industriales automáticas son muy similares a las semiautomáticas, en la medida de que utilizan controles semiautomáticos integrados. Todas las tareas son automatizadas para que no sea necesaria la intervención humana en la preparación de una taza de café. Generalmente, estas máquinas presentan cuatro interruptores: uno para extraer un café corto; otro para dos cafés cortos; otro para extraer un café largo y otro para dos cafés largos. Permite programar el volumen del agua a ser usado por cada interruptor de extracción.

Estas cafeteras son muy prácticas y necesitan poca capacitación para su uso. Generalmente, se encuentran en ambientes de trabajo donde existe mucha rotación de personal.

Para encontrar la mejor cafetera industrial automática o semiautomática, debe verificar los siguientes puntos:

La usabilidad de la máquina
La usabilidad de una máquina del café es muy apreciada, porque da a conocer las ventajas competitivas. Por ejemplo, el uso de luces indicativas LED permite que las señales sean reconocidas fácilmente en la pantalla de la máquina, a diferencia de las lámparas fluorescentes o halógenas que son de lectura difícil.

Cuando adquiere una cafetera industrial espresso, debe notar todos sus factores de usabilidad, como por ejemplo:

• Verificar como se manipula el porta-filtro para encajarlo en la máquina y notar el punto de bloqueo.
• Verificar la distancia existente entre los grupos de la máquina de café y la base. De este modo, conocerá el espacio disponible para su vaso desechable o su taza.
• Verificar si el tablero de calentamiento es muy útil o si sólo es un elemento de decoración superfluo.
• Notar la posición de los interruptores y ver si presentan una lectura fácil e instintiva.

Los materiales usados
Los materiales sólidos son los más usados en la construcción de un equipo para restaurante y especialmente de una máquina de café (tanto internamente como externamente). En la mayoría de los casos, el metal es mejor que el plástico, porque da a la máquina un aspecto más funcional, robusto y sólido. El plástico es un material más susceptible de romperse o derretirse mientras que el metal es más robusto.